Quiero en este blog,
entrando el Año Nuevo, rendir un homenaje al sociólogo Alberto Grusón, con
ocasión del reciente libro publicado en su honor. Es una autobiografía razonada
por él mismo, merced al empuje de las coordinadoras del libro, Matilde Parra de
Niño y Verónica Zubillaga. Constituye la primera parte. Se completa con una
segunda parte constituida por artículos de amigos y pupilos que han acompañado
a Alberto Grusón en su trayectoria de vida científica. Este nuestro y breve
homenaje en este blog consiste en un poema de Año Nuevo de Timoteo Marquina, en
el que nos regala su espiritualidad con el tiempo nuevo del Año desde la
Salamanca de 1960, y en una narrativa argumentada con el problema del pago de
nuestra deuda con Alberto Grusón
AÑO
NUEVO
(EL
AZUL)
(Tiempo eterno le
llena. El mismo Dios.)
Hombre,
siempre el sistema más perfecto,
regular
en sus vueltas y en sus alas,
roza
hoy su desvarío en el azul.
El
azul tan armónico y tan sólido,
límite
en donde chocan las dos fuerzas
nucleares
que existen. (Las separa
con
resistencia al punto). Él es el año,
línea
de dirección de cada astro;
él
ahoga la tierra con mil cintas
eléctricas
de sueño. Siempre es él
el
estanque poblado de ebrios cisnes.
Olas
de amor en calma en él se duermen
ya
próximas a un lecho de corales,
tan
pronto empiece el signo jubilar.
Todos
los puertos son el firmamento.
Los
días cruzan sólo latitud.
Timoteo
MARQUINA: Hombre para Morir, Ágora,
Madrid, 1961, 33.
ARGUMENTO
EN VOZ 3
El tiempo cósmico dirige la orientación de cada astro,
de cada planeta. Arrojados a todos los puertos del firmamento, la luna, nuestro
primer puerto, se convierte en protagonista también de todos los sueños, de
todos los desafío, de todas las crítica, que se ciernen sobre la tierra a
instancias de nuestros deseos azules. El hombre aspira así a establecerse como
el sistema perfecto dueño del espacio sideral total, casi lindando
demiúrgicamente con los tiempos y espacios eternos. En medio de esta lontananza
lunar, un quejido infantil resuena tanto, que se convierte al final en una
interpelación a los hombres esclarecidos: el deseo del niño de plantar sus
sueños en la luna es para que los sabios
hombres los realicen en la tierra ¿Podemos imaginar cómo el deseo de
plantar un árbol en la luna puede realizarse como un jardín de sabiduría en el
conocimiento sociológico?
En el siguiente cuadro, el afán por pagar una deuda se
hace homenaje-testimonio del sabio plantando un conocimiento en la tierra para
mejorar la habitación de la sociedad.
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